Esta actividad le ayudará a su hijo a comprender la conexión entre las emociones y los comportamientos y creará conciencia sobre los sentimientos. Su hijo también tendrá la oportunidad de practicar las habilidades de escucha.
Juegue “Simón Dice” con su hijo, substituyendo frases de los diferentes sentimientos.
Puede presentarle esta actividad a su hijo diciendo: “Juguemos, Simón dice sentimientos. Cuando diga ‘Simón dice’, muéstrame ese sentimiento en tu carita. Recuerda, si no digo ‘Simón dice’, no debes mostrarme el sentimiento”. Por ejemplo, “Haz una carita feliz”.
Direcciones:
“Simón dice, haz una cara feliz”.
“Simón dice, haz una cara de enojo”.
“Simón dice, haz una cara de asombro”.
Una vez que su hijo comprenda cómo jugar este juego, dele a su hijo la oportunidad a que él le de instrucciones a usted para que también pueda observar cómo es que usted muestra sentimientos con su cara. Puede turnarse para ver en cuántos sentimientos pueden pensar, demostrar y discutir juntos.