Al hablar sobre cómo las personas son similares y diferentes, su hijo puede empezar a ver que él o ella es único/a. Su hijo expresará lo que lo hace especial al hacer un dibujo de la huella de su mano y nombrar cualidades escpeciales en cada dedo.
Haga que su hijo apoye la mano en papel de construcción. Pídale a su hijo que extienda sus dedos y tracen la manito en el papel con cuidado.
Después, pídale a su hijo que nombre cinco cosas especiales sobre él o ella. Por ejemplo, su hijo podría decir: “Tengo ojos azules” o “Sé jugar al fútbol”. Quizá tenga que proveer uno o dos ejemplos para ayudarle a su hijo. Trate de incluir algunos aspectos positivos de las habilidades o de la personalidad de su hijo, en lugar de solo rasgos físicos.
Mientras su hijo vaya diciendo cada cosa, escríbala dentro de cada dedo de la huella. Si lo desea, su hijo puede colorearlos o agregar pequeños dibujos.
Durante la actividad, hable con su hijo sobre cómo él o ella es único y tiene similitudes y diferencias con otras personas.