La salud física y el desarrollo motriz de los niños pequeños además de ser importantes para su desarrollo general, ayudan a preparar a los niños para la escuela y a establecer hábitos saludables que pueden seguir hasta la adultez. Las familias pueden usar las actividades en esta sección para apoyar la salud y el bienestar de los niños, el desarrollo de la motricidad gruesa y el desarrollo de la motricidad fina. Las actividades que apoyan la salud y el bienestar incluyen alentar a los niños pequeños a mover sus cuerpos en crecimiento, optar por alternativas saludables, entender reglas de seguridad y practicar rutinas de cuidado personal con más independencia a medida que van creciendo (como comer, vestirse, lavarse las manos, etc.). Las actividades de motricidad gruesa ayudan a los niños a coordinar el equilibrio, controlar los movimientos de su propio cuerpo y fortalecer los músculos grandes incluyendo brazos, piernas y tronco a través de rodar, sentarse, gatear, jalar para ponerse de pie, caminar, trepar, correr, saltar, lanzar, atrapar, etc. Las actividades de motricidad finaayudan a fortalecer los músculos pequeños de las manos y los dedos. Las habilidades de motricidad fina que se desarrollan durante la primera infancia y la niñez, como intentar alcanzar, agarrar, manipular objetos pequeños, pasar páginas en un libro y dibujar, ayudan a prepararlos para tareas como abotonar, atarse las agujetas y escribir a medida que van creciendo.